De su vida...

domingo, marzo 06, 2005

La empezó a seguir desde que bajó del bus, se detenía con ella en las tiendas que le interesaban y aceleraba el paso cuando ella se apuraba. Cuando se asustó dió media vuelta y se fue transmiéndo las ganas de que no la siga más... la vio desubicado y siguió su camino.

Ya son incontables los «gente rara» que se le vienen a la cabeza cuando observa a todos mientras camina.

9:10 p.m.